Y un dia un niño recibio una paleta de dulce, de esas redondas multicolor. Una paleta que parecia un arcoiris comprimido a ese pequeña forma hermosa que le sonreia.
El pequeño no tuvo mas remedio (segun sus costumbres) que adorarla, la tomo y la llevo a su casa, la puso en su mesa de noche para verla cada vez que pudiera. Decidio idolatrarla porque segun su corazón era la manera mas prudente de homenajear cosa tan deliciosa.
La paleta por su parte, se sintio frustrada y vio que sus esfuerzos de que tal amante de los dulces la llevara al gran climax de su vida, que la comiera y cumpliera el unico proposito por el que habia decido llegar a sus manos nunca sucederia.
Por ello un dia y antes que el pequeño inclusive pudiera darse cuenta que un dulce no esta hecho para ser idolatrado de esa manera, si no para ser mordido, o lamido, o alguna otra creativa manera de acabar poco a poco con ese ser para mezclarse en las entrañas donde solo existen comida, jugos gastricos y mariposas, la paleta hermosa multicolor se mezclo con el aire y desaparecio con el viento.
miércoles, 3 de febrero de 2010
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